Ya se que voy algo retrasado, pero Silent Hill Origins era uno de esos juegos que tenia reservado en la estantería desde su salida, para jugarlo un día tranquilamente y sin agobios. Y ese día (mejor dicho, esos tres días) ha llegado. Y si, lo he disfrutado como un enano, pero ha tenido dos básicos, su duración y su facilidad… Y es que mi reciente vena por revivir la saga Silent Hill (no se a quien será debido…), me ha hecho jugar casi a las vez el primer SH de PSX y este SHO de PSP, haciendo un comparación casi inevitable entre las dos entregas.
Y eso ha sido por que lo que hay esta muy conseguido. Es decir, es un Silent Hill clásico, de los de la primera ornada y dejando de lado excentricidades como el The Room o el Homecoming. Me ha gustado mucho, y me ha pegado algún que otro susto jugando en la PSP, algo que a priori, me parecía casi imposible. Guarda todo lo clásico, lo mejora y lo expande. Y el hecho poder defenderse con casi cualquier tipo de arma (lo de la TV portátil me parece muy friki), le da un toque estratégico que mola. Aunque yo por mi parte, elegí el escapar de todos y cada uno de los monstruos, hasta que que llega un punto que hay tanto, que te es imposible. Y entre tanto reservas las armas de fuego para los jefes finales. Y ni hablar de utilizar los espejos para pasar de realidad, algo que me tenia encantado, por que lo hace todo un poco menos lineal (aunque al final siga siéndolo).
Aun asi es un Silent Hill a la altura de los mejores. Con escenarios maravillosos como el teatro o el motel, y sobre grandes a más no poder. Un apartado técnico de nivel de PS2, y una linterna con vida propia, que hacia que se me cayera la baba. Un juego que si bien no llega a se redondo por su duración y facilidad, es una demostración de que todavía se pueden hacer buenos Survivals, a ver si son capaces que conservar ese espiritu en las nuevas entregas de la saga, por que con Homecoming se perdieron completamente.